UN CUENTO SUFI
Un maestro sufí viajaba en barco con
su discípulo y sobrevino una tormenta.
Todos asustados se zarandeaban con el vaivén del barco, el viento, la
lluvia y se sujetaban como podían. Sólo
el maestro permanecía tranquilo.
El discípulo, le pregunta “maestro,
la tormenta es muy fuerte, estamos en peligro de muerte”.
El maestro le responde “ en todo
momento estamos igualmente cerca de la muerte”.
Es cierto, solo que no lo tenemos en
cuenta, y en verdad seria muy difícil vivir pensando que podemos morir en
cualquier momento. Es más, felizmente no
lo hacemos. Es ahora en estos momentos
que la amenaza se hace presente y vivimos en la incertidumbre total. Total, porque no sabemos cómo ni cuándo
terminará. Tampoco sabemos como cambiarán las reglas de juego.
Lo que nos toca es apelar a nuestra
fuerza interna aquella que siempre nos saca adelante a pesar de todo y en
cualquier circunstancia. ¿Cómo accedemos
a ella? tomando conciencia de nuestra respiración es como empezamos a conectarnos
con nosotros mismos, es simple está ahí no más. Es la base de toda meditación, cualquier método es válido. Luego
a lo largo del día volver en cualquier momento a la luz del corazón, aquella
que nos conecta con el amor universal, con Dios, con el Universo.