“Confía en que los cambios que realices en tu vida tendrán un efecto positivo en tus hijos. Si te preocupas, es que pretendes tomar en tus manos su destino. Interfieres en lo que su propia alma hace por ellos” B Hellinger
Los niños siempre están bien, lo que nos muestran, muchas veces, cuando su comportamiento es difícil es que están resonando con algo del sistema familiar que no fue completado. Algo que quedó pendiente. Una tristeza grande, una agresividad o dolor, que no fueron sanados. Al tomar este asunto en nuestro corazón de padres, el sistema se ordena y el hijo se libera. El efecto de las constelaciones es muy poderoso y se nota desde la primera sesión.
Asumir la filosofía de las fuerzas del amor en nuestra vida es un proceso que nos exige un trabajo constante. El inconsciente se nos va revelando de a pocos y vamos colaborando con el orden y sanación de todo el sistema familiar desde nuestro lugar, haciendo lo que nos corresponde y solo esto. Implica además soltar los reclamos, los compromisos y promesas subconscientes que hemos realizado de pequeños.