Y por favor bendíceme cuando sea feliz aunque a ti te costara
tanto”
El niño nace y es leal desde el principio a sus padres y a su
sistema familiar y así, muchas veces, dice en su inconsciente. “Yo llevo tu
tristeza por ti” lo que solo duplica la tristeza, o “yo como tú no triunfo” y
entonces siente que a pesar del trabajo no sale adelante, o no logra sus proyectos;
“yo llevo tu carga” cuando hay algo muy
duro en el sistema familiar
Cada familia es única y cada
niño dentro de la familia asume un rol y lleva parte de los asuntos pendientes
del sistema familiar. También los dones y talentos que muchas veces se
bloquean por las decisiones tempranas, infantiles, de no superar a los padres. Cuando por
ejemplo hay una primera generación de profesionales, donde el padre no pudo
mantener a su familia o cuando hay heridas de abandono la persona siente que
algo le falta para salir adelante y lograr sus objetivos.
Una sesión de constelaciones nos lleva a la profundidad necesaria
para poder comprender cuál es el mandato que recibimos o promesa que hicimos y
poder decirles desde el corazón “bendíceme cuando sea feliz y cumpla mis metas,
aunque a ustedes les costará tanto.” Lo mismo vale para la vida de pareja y los
diferentes aspectos de la vida.