El
coach acompaña, orienta, sobretodo pregunta pues sabe que el cliente cuenta con las herramientas y
recursos necesarios para solucionar los retos que se le presenten.
Un
refrán dice que "todo es
cuestión del cristal con que se
mire". Cada uno tiene una manera
de ver las cosas y nuestra mirada al mundo está
condicionada por nuestras experiencias, sistema de creencias, paradigmas, etc. Un proceso de Coaching amplía la mirada al
mundo haciendo posible una nueva perspectiva donde con pequeños ajustes, se
puede cambiar comportamientos para un mejor desenvolvimiento en los diferentes
ámbitos de la vida.
Hoy
se habla mucho del Coaching, como decía, el rol del coach es enriquecer la
mirada del cliente y proporcionando observaciones objetivas, así, ayudar al
cliente a ser consciente de la percepción de sí mismo y de su mundo .
El
coach escucha activamente al individuo o
al equipo para lograr un acercamiento profundo al mundo del cliente. En este acercamiento el coachee logra hacer
planeamiento de objetivos muy
bien pensado, aprovechando al máximo sus oportunidades y potenciales. Así mismo, el coach promueve los cambios
necesarios mostrando perspectivas diferentes, que ayudan a ver los puntos ciegos para encontrar nuevas
posibilidades y acompaña al coachee en la consecución de los objetivos.
Pienso
que el Coaching llegó para quedarse para
liderar la propia vida y una manera nueva de ser líder en las
organizaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario